Cuando hablamos de la recarga de vehículos eléctricos existen tres factores diferentes en este proceso y se pueden confundir entre sí. Estos tres factores son : tipos de conectores, tipos de recarga y modos de carga.
Hoy nos centramos en explicar los distintos tipos de recarga y sus diferencias. Los tipos de recarga los podemos clasificar según el tiempo que tarde en recargar la batería. Lo más habitual es hablar de recarga lenta o recarga rápida, pero existen otros tipos:
- Recarga súper-lenta: cuando la intensidad de corriente se limita a 10 A o menos por no disponer de una base de recarga con protección e instalación eléctrica adecuada. La recarga completa de las baterías de un coche eléctrico medio, unos 22 a 24 kW de capacidad, puede llevar entre diez y doce horas.
- Recarga lenta o convencional, ya que utiliza el voltaje eléctrico del mismo nivel que la vivienda, es decir a 16 A, demandando unos 3,6kW de potencia. La recarga completa del vehículo eléctrico tardaría unas ocho horas. Este sistema se puede utilizar en garaje propio o comunitario y se suelen emplear las horas de la noche para cargar, ya que existe menor demanda energética.
- Recarga semi-rápida, emplea 32 A y 230 VAC de voltaje eléctrico. Esto supone que la potencia eléctrica que necesitara es de aproximadamente 7,3 kW. Mediante este procedimiento la batería suele tardar unas cuatro horas en cargarse. Este tipo de dispositivos también es posible instalarlos en garajes propios o comunitarios.
- Recarga rápida, requiere una mayor intensidad eléctrica y, además, entrega la energía en corriente continua y la potencia que se demanda oscila entre 44 y 50 kW. Es la que más se parece al actual repostaje en gasolineras convencionales, ya que en aproximadamente unos 15 minutos se puede recargar la batería casi un 70%. Este tipo de dispositivo no sería posible instalarlo en ningún garaje, ni propio ni comunitario, puesto que requiere de una adecuación de la red eléctrica debido a su potencia.
- Recarga ultra-rápida, debe considerarse aún experimental y sólo en vehículos eléctricos con acumuladores de tipo supercondensadores, es decir algunos autobuses. La potencia de recarga es muy elevada y entre 5 y 10 minutos se pueden recargar las baterías.
Fuentes : Endesa,FAEN.